La enóloga de Bodegas Ángel reivindica el valor de las variedades autóctonas de Mallorca y apuesta por una mínima intervención en bodega para reflejar la esencia del paisaje en cada copa.
Santa Maria del Camí, 18 de agosto de 2025. Lola Hermoso, enóloga de Bodegas Ángel, lleva años trabajando para que cada uno de sus vinos sea una expresión honesta del territorio mallorquín. Ubicada en un enclave privilegiado entre la Serra de Tramuntana y la influencia del mar, la bodega apuesta por una viticultura respetuosa, centrada en el cuidado de las cepas y la preservación del carácter autóctono.

“Desde el viñedo trabajamos con variedades como la Mantonegro o la Premsal blanc, que son las que mejor nos identifican”, explica Hermosa. “Cuidamos cada parcela de forma individual y en bodega intervenimos lo mínimo para lograr vinos equilibrados que reflejen nuestra tierra”.
Entre sus referencias más destacadas se encuentran el Gran Selección, un vino estructurado y elegante elaborado con una cuidada selección de uvas (Cabernet Sauvignon, Merlot y Manto Negro), y el Angel Negre, de perfil más fresco y desenfadado. “El Angel Negre tiene un paso por barrica más leve, lo que lo hace suave y fácil de disfrutar”, apunta. A estas etiquetas se suma el exclusivo Manto Negro 500, un monovarietal de edición limitada con solo 1.500 botellas anuales, nacido de viñas de bajo rendimiento y elaboraciones muy cuidadas.

La bodega combina tecnología de última generación con una filosofía de mínima intervención. “Seleccionamos levaduras que aporten personalidad y usamos barricas que respeten la frescura del vino”, señala la enóloga, quien destaca que el entorno es parte esencial del producto final.
Además del trabajo técnico, Hermoso también se implica en la experiencia enoturística. “En las catas buscamos que el visitante conecte el paisaje con la copa, que entienda nuestra historia y sienta nuestras sensaciones a través del vino”.

Respecto al futuro del vino mallorquín, se muestra optimista: “Tenemos un gran potencial. Lo autóctono y nuestro enclave nos hacen únicos a nivel internacional. Solo necesitamos seguir transmitiendo nuestra cultura para que cada visitante se convierta en embajador de nuestros vinos”.