Once equipos, tres de ellos de Mallorca, competirán los días 13 y 14 de septiembre en la cuarta cita del circuito nacional, con el equipo Solgreen como líder provisional.
Palma, 10 de septiembre de 2025. La Liga Iberdrola de Vela Femenina llega este fin de semana a Mallorca para celebrar su cuarta prueba del calendario 2025 en el Real Club Náutico de Palma. La competición, que se disputará los días 13 y 14 de septiembre en formato round robin (todos contra todos), contará con once equipos a bordo de seis embarcaciones de la clase Blue Sail 24, las mismas que se han utilizado en la Copa del Rey MAPFRE en la Women’s Cup.
La jornada previa, el viernes 12, estará reservada a entrenamientos para que las tripulaciones puedan familiarizarse con los barcos. Entre los equipos participantes destacan tres mallorquines —Real Club Náutico de Palma, Reial Club Nàutic Port de Pollença y Club Nàutic Arenal— además del Solgreen, también con representación balear.
El Solgreen lidera actualmente la clasificación provisional de la Liga Iberdrola tras las pruebas celebradas en Getxo, Calpe y Gran Canaria. Le siguen el Real Club Náutico de Vigo y el Reial Club Nàutic Port de Pollença, que mantienen opciones de mejorar posiciones en aguas mallorquinas.
El director de competiciones de la Real Federación Española de Vela (RFEV), Lucky Serrano, ha valorado la consolidación del torneo: “En estos cuatro años la competición ha ido creciendo con la incorporación de equipos nuevos y se ha consolidado con un número de participantes ideal, entre diez y doce. Este formato permite aprovechar al máximo el tiempo de navegación, ya que con más equipos los cambios de barco serían demasiado frecuentes y se reduciría el número de pruebas”.
Uno de los ejes principales de la liga es garantizar la igualdad en la competición. Para ello, los barcos se aparejan y ajustan de manera idéntica y cada jornada se sortean las embarcaciones, de modo que todas las tripulaciones compiten con todos los barcos un número similar de veces.
Además, la Liga Iberdrola se ha convertido en una plataforma de reintegración para muchas regatistas. “Algunas mujeres habían dejado la competición tras la etapa olímpica y han encontrado aquí una manera de volver a navegar en un entorno exigente pero sin la presión de la alta competición. Les ha permitido descubrir otra faceta de la vela, como es la navegación en crucero y en equipos más numerosos”, subraya Serrano.