Ramon Perpinyà, presidente de EMAYA, ha presentado esta mañana el balance del servicio de desbroce, uno de los que más se ha reforzado a lo largo de 2022.
El incremento de recursos ha permitido la eliminación de hierbas a más de 2.000 km lineales de calles, aceras y otros espacios públicos.
De media se ha contado con 12 operarios destinados a diario a este servicio, entre el personal propio de EMAYA y el apoyo de una empresa del tercer sector contratada para esta función, que ha creado 9 puestos de trabajo para la eliminación de hierbas.
Los diversos equipos de trabajo han trabajado en todos los barrios de Palma a lo largo de todo el año, desbrozando en los lugares que previamente los servicios detectan que son los más necesitados por la presencia de hierbas.
La mayor intensidad de trabajo fue en septiembre, con 309.000 metros lineales desbrozados, cuando la media mensual es de 165.000 metros.

Actualmente, estas últimas semanas, el trabajo se está centrando en el desbroce de las 16 zonas de ocio canino: Son Dameto, Sagrado Corazón, La Ribera, Joan Gris, sa Riera, Calle de la Orquídea, Son Parera, calle de Miquel Fleta, parque Krekovic, es Carnatge, Son Puig, La Femu, Pedro Poveda, Joan Coll, Son Real y Mas Crespo.
Otras actuaciones destacadas se han realizado también en las limpiezas periódicas de Son Gotleu y el Camp Redó, donde además de realizar la retirada de residuos voluminosos acumulados, se eliminan las hierbas de los espacios de uso comunitario.
Asimismo, el mes pasado se realizó el desbroce del solar de Son Güells afectado por los vertidos, previa a la limpieza y retirada de residuos que se está realizando en este punto.
Bajan un 36% las quejas y solicitudes desde 2019
Como resultado de este refuerzo del servicio de eliminación de hierbas, las quejas y solicitudes en relación con esta cuestión se han reducido un 36% con relación a 2019 (año previo a la pandemia), pasando de 455 a 290. En 2020 fueron 381 y en 2021 un total de 252 solicitudes de eliminación de hierbas.