Las propuestas de este año giran entorno de estas tres premisas: el momento presente, el ritmo, y el espacio y las identidades. Encontrará
piezas sanadoras y simbólicas como The Cloak, que pretende inaugurar el festival con un ritual cargado de significados que aspiran a
armonizar nuestra existencia y tender puentes entre culturas; pero también otros que trabajan la identidad, ¿cómo Am I What? o
se interrogan sobre la distinción entre realidad y ficción tecnológica, como Dance is My Heroine o Súper Fraude. Otros lo hacen sobre la
distinción entre dentro y fuera, como a Esberlar, o saliendo de la propia conciencia y dedicándose a la pura fisicidad, como Comfort Zone.
a largo plazo.


