La Policía Local de Palma ha avanzado que ha devuelto a su propietario los 110 patinetes eléctricos que le fueron requisados en la últimas semanas en Platja de Palma por incumplir la normativa municipal de seguridad vial. La devolución se ha producido una vez el propietario ha desembolsado la cantidad de 25.500 euros, sanción correspondiente a la retirada de todos estos vehículos de movilidad personal.
Fuentes de la Policía Local han confirmado que el propietario de los patinetes eléctricos requisados ha podido llevárselos tras acreditar documentalmente que son de su propiedad y pagar las tasas correspondientes y las estancias en el depósito de Son Toells.
Ahora, la Policía Local empezará a tramitar las sanciones que corresponden a cada uno de los patinetes requisados en su día por las infracciones que hayan cometido en función de lo dispuesto en la normativa de seguridad vial.
El pasado mes de julio, la Policía Local de Palma empezó a requisar estos patinetes colocados en varias calles de Platja de Palma, Can Pastilla y zonas de s’Arenal de Llucmajor.
El “modus operandi” de esta empresa consiste en que coloca los patinetes en diferentes puntos de estas zonas costeras y mediante una aplicación, los usuarios interesados los alquilan y después los vuelven a dejar en el mismo lugar dando así por finalizado el contrato.
En relación con las sanciones, éstas van desde los 90 hasta los 200 euros dependiendo del tipo de infracción que se cometa como pueda ser dejar el patinete en la acera, obstaculizar la vía pública y otras.